Partimos de la base de que al principio de una legislatura con un nuevo equipo de gobierno, es difícíl saber qué corresponde a la inercia del anterior y qué corresponde al nuevo. Lo que sí podemos constatar es lo que opinaba sobre ciertos aspectos cuando estaban en la oposición y cómo están actuando una vez que han llegado al gobierno. Y en este aspecto, se puede decir que prima una total incoherencia, o como se dice coloquialmente “donde dije digo, digo Diego”.
La más fragrante en este sentido es sobre el reproche continuo del Sr. Villalobos al anterior Alcalde sobre la dedicación exclusiva a Utrera. Hoy por hoy ni sabemos cuánto cobra el Sr. Alcalde, ni de dónde, ni qué ocupación tiene fuera del Excmo. Ayuntamiento de Utrera. Y a pesar de las continuas preguntas de la oposición por todas las vías posibles, la respuesta ha sido siempre la misma: el silencio. Esta incoherencia también se extiende a la designación de puestos de confianza como el del Jefe del Gabinete de Prensa, ya que la anterior ocupante en el cargo fue muy criticada por no tener la carrera de Periodismo. El actual tampoco.
-También se quejaban del maltrato que sufría la oposición por parte del equipo PA-PP. Cuando llegaron al gobierno, el portavoz socialista, el Sr. Campanario, anunció que iban a “tratar a la oposición de una forma justa”, no como habían sido tratados ellos anteriormente. Esa justicia se ha traducido en asfixiar económicamente a los grupos de la oposición y en vetar toda moción cuyo debate pudiera ser demasiado molesto para llevar a Pleno por parte del equipo de gobierno. Además los ruegos y preguntas se contestan en el siguiente pleno ordinario, y ello significa un mes, y nunca se responde a todo.
Y si analizamos la otra parte del pacto PSOE-IU, la encabezada por el Sr. Guirao, el cual siempre se jacta de ser coherente con sus ideas y de votar en conciencia, tenemos a un convidado de piedra que reduce su coherencia al anticlericalismo y a atacar todo lo que huela a patriótico.
Las puertas abiertas del Ayuntamiento que al final sólo sirven para hacer turismo, el nuevo y caótico organigrama de las delegaciones y áreas de gobierno, la dedicación exclusiva de todo el equipo de gobierno, los cuales se fueron de vacaciones recién llegados a su cargo y otros incluso fueron nombrados mientras estaban de veraneo, los costosos e incomprensibles traslados de áreas a otras dependencias municipales, la incontinencia verbal al nivel de un adolescente del Sr. Alcalde y del PSOE por las redes sociales, la incertidumbre y rectificaciones sobre ciertos proyectos como el césped de Vistalegre o la zona azul, el catastrófico primer día de Preferia, el Sr. Villalobos atribuyéndose como propios proyectos aprobados por el anterior equipo de gobierno,…
En definitiva, 100 días de pan y circo en que el nuevo equipo de gobierno, ha vendido mucho, pero ha hecho muy poco.